La burocracia de La Caravana-Lobo Suelto y Desde Bolívar, junto a los kirchneristas de La Jauretche, impuso el ingreso de Rosita al colegio y un proyecto para que al rector lo elija Hallú. A través de las asambleas, Tinta Roja adoptó el programa de la burocracia del CENBA.
Para que al rector no lo elija el Consejo Superior
¡Hay que boicotear las elecciones de la burocracia y derrotar el golpe de Hallú-Más Vélez!
Llamamos a los luchadores a formar un Comité de Lucha contra el golpe que defienda el Estudiantazo de los secundarios para echar a Macri y plantee: ¡Abajo el golpe! ¡Fuera Rosa López de Del Águila y los vicerrectores! ¡Boicot a las elecciones armadas por la intervención y la burocracia del CENBA! ¡Ningún rector del Consejo Superior!
Rosita y sus vicerrectores ya entraron al colegio. Después de meses de “auto-gestión” y “nuevos” métodos de “lucha”, como subastar rectores, el golpe de Hallú-Más Veléz ya hizo pie en el colegio. La burocracia de La Caravana-Lobo Suelto y Desde Bolívar, junto a los kirchneristas de La Jauretche, impuso que se levantaran los cordones para que entrara Rosita con el objetivo de discutir junto con ella en el Consejo Resolutivo los proyectos de elección de rector. ¿Y cuál fue el resultado de esa “discusión”? Unas elecciones de rector el 4, 5 y 6 de octubre, donde los docentes tienen mayoría absoluta y donde se le presenta el listado de todos los candidatos votados a Hallú para que la decisión final la tome el Consejo Superior. ¿Qué tenemos entonces los estudiantes del Nacional? Que entró Rosa López de Del Águila y que el rector lo va a terminar eligiendo el Consejo Superior. Esa es la derrota que Lobo Suelto pretende hacer pasar como “triunfo histórico del movimiento estudiantil” en su último volante.
Mentira N°1: “Los estudiantes, docentes y no docentes están logrando imponerle al Consejo Superior la voluntad de la comunidad educativa”. ¡Rosita es rectora!
La burocracia del CENBA está montando un operativo político para encubrir la derrota que les ha impuesto a los estudiantes del Nacional. Pretenden imponer la caracterización de que la ofensiva de Hallú dio lugar a una contra-ofensiva de estudiantes y trabajadores por la democratización. Sin embargo, la realidad es que los estudiantes y trabajadores habíamos votado el rechazo al golpe y a la intervención, y sin embargo Rosa López de Del Águila ya ha tomado el mando en el colegio como rectora. Lejos de “imponer nuestra voluntad al Consejo Superior”, es el Consejo Superior el que impuso su voluntad y logró hacer pasar el golpe. De hecho, inmediatamente luego de su ingreso la interventora colocó a miembros de la Franja Morada en puestos jerárquicos asociados a la rectoría, lo que demuestra que con el golpe se está desarrollando el copamiento de la dirección del colegio por parte de la Franja. El “rechazo a la rectora trucha” que plantea de palabra la burocracia del CENBA encubre su capitulación abierta: en la resolución del Consejo Resolutivo sobre la elección de rector, han designado como presidenta de la Junta Electoral, autoridad del comicio, a la mismísima “rectora trucha” Rosita. ¡O sea que los golpistas van a ser los que fiscalicen la elección! Como ya lo dijimos antes, cualquier elección de rector que se desarrolle en el marco del golpe será una elección de rector preparada por los golpistas y funcional a Hallú y al Consejo Superior.
Mentira N°2: “Será el primer rector elegido por democracia directa”. ¡Los docentes tienen mayoría absoluta y la decisión final la tiene el Consejo Superior!
El eje sobre el cual giran las mentiras de la burocracia del CENBA es que “el rector será elegido por democracia directa”, “por estudiantes, docentes, no docentes y graduados”, y que por lo tanto será, supuestamente, el primer rector elegido por la comunidad educativa. A partir de eso califican de histórico el proyecto que votaron en el Consejo Resolutivo con los consejeros graduados de Proyecto Sur-Pino Solanas, el partido de González Gass. Sin embargo, esto también es falso.
Primero, porque con el proyecto de la burocracia la ponderación se establece a partir de la proporción que existe en el Consejo Resolutivo. Entonces, los docentes tienen mayoría absoluta, los estudiantes tienen la mitad de porcentaje que los docentes, los graduados la mitad que los estudiantes, y lo no docentes la mitad que los graduados. Pero las direcciones docentes se dividen entre los sectores vinculados a González Gass, la burocracia de UTE-CTERA, la Franja Morada y el kirchnerismo. No se ha desarrollado en la última etapa una tendencia independiente al interior de los docentes, por lo que al tener mayoría absoluta lo más probable es que impongan un candidato que responda a un sector de las camarillas.
Segundo, porque aún si los docentes se dividen, y los estudiantes, graduados y no docentes votan juntos, no hay ningún candidato a rector que defienda la lucha para derrotar el golpe, para echar a Rosita y los vicerrectores, para enfrentar al Consejo Superior contra la venta del campo y el cierre de cursos. Ningún profesor titular se plantó contra el golpe, y no hay ninguno que se quiera plantar contra Hallú. Y nada indicaría que en 17 días, plazo en que vence la presentación de candidatos (24 de septiembre) vaya a aparecer ese supuesto profesor. Entonces, los estudiantes, graduados y no docentes tienen dos opciones: o votan una de las variantes de las camarillas, o votan en blanco y toda la elección fue al pedo porque no surgió de la misma ningún rector que represente a estudiantes y trabajadores. Ya sea de una u otra forma, a través de estas elecciones no existe posibilidad de que los estudiantes y trabajadores elijamos rector.
Y esto es así porque, en tercer lugar, la decisión final la tiene Hallú y el Consejo Superior. La resolución aprobada por el Consejo Resolutivo establece que se le va a presentar el resultado completo de la elección al Superior y que a partir de eso el Superior tiene que elegir rector. Es decir que, en el caso de que Hallú reconozca las elecciones, igualmente va a poder elegir a un rector que responda al Consejo Superior. Todo esto, incluso, suponiendo que Hallú reconoce las elecciones, algo que perfectamente puede no suceder porque así como eligió a Rosita a dedo sin ningún tipo de condicionamiento puede volver a hacer lo mismo y cagarse en el proyecto de la burocracia: él tiene en claro que esta Conducción del CENBA va a seguir haciendo lo posible para que no se tome el colegio “en defensa del proceso electoral”.
Como se ve, la burocracia dejó entrar a Rosita no para luchar por la democratización sino para capitular completamente frente al golpe y abandonar la pelea por ¡Ningún rector del Consejo Superior!
Mentira N°3: “El Nacional de Buenos Aires ha intervenido constantemente en el Estudiantazo”. ¡Se negaron a tomar el colegio mientras el resto de los secundarios protagonizaba la toma generalizada!
Como parte de su capitulación absoluta, la burocracia del CENBA, que actuó constantemente en común con los kirchneristas de La Jauretche, hizo todo lo posible para que el colegio no se tomara en el marco de la toma generalizada de los secundarios. Con el argumento de que “Hallú quería la toma”, dejaron pasar el golpe y aislaron al Nacional del resto del movimiento secundario. Por el contrario, desde el FEL habíamos planteado que con el Estudiantazo podíamos echar a Macri y derrotar el golpe, y por eso propusimos que el colegio se tomara junto a todo el resto. La política de la burocracia, de oposición a la toma, llevó a que entrara Rosita y a que el CNBA no formara parte de las decenas de colegios tomados. Si no tomaron el colegio no fue porque “privilegiaron la lucha interna” sino porque privilegiaron la capitulación dentro del colegio y el levantamiento de las tomas y el abandono del ¡Fuera Macri! en los secundarios.
Tinta Roja se dio vuelta como un panqueque. Terminó defendiendo el programa de la burocracia porque lo votaron las asambleas… que dirige la burocracia.
La política democratizante de Tinta Roja lo llevó a adoptar el programa de La Caravana, Desde Bolívar y La Jauretche. La misma agrupación que hace semanas planteaba que había que defender los cordones para que no entrara Rosita y que rechazaba la política de candidato único de la burocracia porque no había ningún candidato que defendiera la democratización, ahora votó en el Consejo Resolutivo presidido por Rosita el mismo proyecto que la burocracia. ¿Con qué argumento? “Lo votaron las asambleas”. Es decir que Tinta Roja cambió su programa porque la burocracia impuso su posición en la asamblea. La dirección de Tinta Roja dice “que la base decida”, sin importarle el hecho de que “la base” decidió, por la presión de la burocracia, dejar pasar el golpe y armar unas elecciones truchas para que al rector lo elija Hallú.
La política democratizante de Tinta Roja encubre que en las asambleas se desarrolla una lucha política entre agrupaciones y tendencias, más allá de que estás estén representadas incluso por un solo estudiante. Por lo tanto, lo que definen las asambleas está determinado por el peso que tiene cada una de esas agrupaciones y tendencias. Precisamente por eso las asambleas votaron una auto-derrota: porque las agrupaciones de la burocracia del CENBA son mayoritarias en nuestro colegio. Tinta Roja dice que sigue “defendiendo” su antigua posición pero que no puede ir en contra de lo que votan las asambleas. Sin embargo, las asambleas se pueden equivocar, y de hecho se equivocaron. Un luchador lo que tiene que hacer es desarrollar una campaña de agitación, propaganda y organización para revertir la situación, e incluso utilizar la tribuna que representa tener un consejero en el Consejo Resolutivo para contribuir a esta tarea de clarificación política y organización de los estudiantes para la lucha. Por eso, en este caso, un Consejero de lucha tenía que defender los intereses de estudiantes y trabajadores, y para eso tenía que votar en contra de lo votado por las asambleas.
La burocracia del CENBA ha alcanzado un dominio tan grande sobre el movimiento estudiantil del Buenos Aires que toda su orientación capituladora la ha impuesto en asambleas. ¿Por eso dejan de ser una burocracia? No, porque su carácter de burocracia está definido por el contenido de su orientación, que es el de capitular frente al golpe y a Hallú, y porque para alcanzar su posición mayoritaria durante todo 2009 tuvieron que levantar asambleas y movilizaciones, disolver el cuerpo de delegados, y de esa forma intentar reducir a la más mínima expresión cualquier tendencia independiente y de lucha en el Centro.
¿Qué tenemos que hacer los luchadores frente a este cuadro?
En primer lugar, hay que boicotear las elecciones truchas armadas entre los golpistas y la burocracia del Centro, porque su única función es legitimar el golpe de Hallú-Más Veléz y la futura elección de rector en manos del Consejo Superior. Para eso, hay que montar una enorme campaña de agitación, propaganda y organización para que la mayor cantidad de estudiantes, docentes, no docentes y graduados impugnen su voto y demuestren, en las elecciones, su oposición a la intervención.
En segundo lugar, hay que impulsar la toma de colegio como parte del Estudiantazo que sigue en curso. La toma, al mismo tiempo que quebraría el aislamiento frente al resto de los secundarios impuesto por la burocracia, permitiría echar físicamente a Rosita y los vicerrectores del colegio, reabriendo nuevamente la lucha contra el golpe, al mismo tiempo que reforzaría el boicot a las elecciones truchas de rector.
Los militantes de Tinta Roja, que rechazan el golpe y defienden la lucha por ¡Ningún rector del Consejo Superior! tienen que romper con la dirección de su agrupación y terminar con su política democratizante para pasar a defender esta perspectiva, y si no lo logran se tienen que ir de Tinta Roja y defender junto al FEL la lucha para derrotar el golpe.
Para llevar adelante estos objetivos, es que les proponemos a todos los luchadores del Nacional de Buenos Aires la conformación de un Comité de Lucha contra el golpe, para desarrollar en común la lucha por: ¡Abajo el golpe! ¡Fuera Rosa López de Del Águila y los vicerrectores! ¡Boicot a las elecciones armadas por la intervención y la burocracia del CENBA! ¡Ningún rector del Consejo Superior!
Esta semana:
¡Tomemos el colegio como parte del Estudiantazo!
Jueves 9/9 a las 18hs en el Pellegrini
Plenario del FEL-Secundarios
Viernes 10/9 a las 12:30hs y a las 17:30hs en el hall del colegio
Reunión del Comité de Lucha contra el golpe
¿La campana de la Franja Morada?
ResponderEliminar¿Desde cuándo una agrupación "de izquierda" boicotea las primeras elecciones de un colegio preuniversitario?
¿Desde cuándo una agrupación "de izquierda" dice que no hay que respetar el mandato de ninguna asamblea, porque "se equivocan"?
¿Desde cuándo una agrupación "de izquierda" desconoce el paso gigante que significa que voten los trabajadores no docentes, por primera vez en la UBA?
¿Desde cuándo una agrupación "de izquierda" no lucha por imponerle el rector que salga electo al consejo superior?
Las mentiras son demasiadas. La ponderación del voto es muchísimo más progresiva que la de todas las facultadesde la UBA, el hecho de el voto de los docentes trate de equipararse con el de los estudiantes (que igualmente con esa ponderación seguimos podiendo hasta elegir rector solos) responde a que los docentes son menos por la dinámica orgánica de la comunidad educativa, no a que "la conducción" cede. ¿Cuál es la propuesta? ¿Que haya 1600 votos de estudiantes y 400 de docentes? ¿No les parece antidemocrático? ¿No les quita a los trabajadores docentes la posibilidad de elegir rector?
Ni hablar de la hipocresía de un grupo que mientras dice "luchar contra el Golpe" se junta a espaldas de los estudiantes con la autoridad interventora a pedirle plata para un viaje.
Hay un pequeño paso entre "hacerle el juego a la derecha" y "ser la derecha".
Efectivamente, esta es la campana de la Franja Morada.