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viernes, 13 de noviembre de 2009

Pastorino prepara al Pelle para que venga un nuevo Viegas

Contra el mandato de todas las asambleas, quieren dejar libres a los luchadores

Pastorino prepara al Pelle
para que venga un nuevo Viegas

El 18 de diciembre de 2006, de manera completamente antidemocrática, ilegítima e ilegal sesionó la Asamblea Universitaria que eligió a Hallú como rector de la UBA. La represión de la Policía Federal, de la cual los estudiantes del Pelle también fuimos víctimas, no ahorró recursos. Utilizó a la guardia de infantería ligera, a la infantería pesada, varios camiones hidrantes e incluso llegó al extremo de disparar a las columnas de docentes y estudiantes con balas de goma. Con tal de defender su caja, las camarillas dejaron de lado cualquier libreto pacifista y mostraron su verdadero rostro con la represión. Todo esto, desde ya, con el decidido apoyo político del gobierno nacional: era una orden de los Kirchner.

Un tiempo después, fue el mismo Hallú (sí, el que asumió con la salvaje represión de la Federal) quien eligió a Héctor Pastorino como rector del Pellegrini. Mejor dicho, lo puso a dedo para que dirija el colegio como más le convenía porque Pastorino era y es un hombre de confianza de Hallú. De esta forma, luego de que fracasara la variante represiva de la Franja de Económicas, personificada en Viegas, las camarillas decidieron apostar por una suerte de “intervención kirchnerista” en el Pellegrini. Querían que el Pelle esté bajo el control directo de Hallú y de ahí es que surge el nombramiento como rector de Pastorino. Él vino al Pelle para hacer lo que ni la Federal ni Viegas pudieron lograr: aplastar al movimiento por la democratización.

Pastorino y Viegas, con sus diferencias, siempre representaron distintas estrategias y sectores dentro de las mismas camarillas de la UBA porque son la expresión del cogobierno (y las disputas) que hay entre radicales y kirchneristas. Por algo los dos fueron “rectores de este Consejo Superior”. En definitiva, rectores de las camarillas que se perpetúan en el poder gracias a la represión.

Tenemos que preguntarnos entonces: ¿pueden estas “autoridades”, que asumieron a los tiros con la Federal y bajo las órdenes de Hallú, decir algo sobre la violencia? ¿Tienen algún tipo de “legitimidad” más que la fuerza de la burocracia, la caja y la policía? ¿Tienen algún tipo de autoridad moral para acusarnos de “violentos” los mismos que asumieron gracias a la represión de la Federal? Evidentemente, no.

Pastorino y Hallú asumieron gracias a la violencia y disponen de ella cada vez que hacen sesionar al Consejo Superior con vallas y uniformados que custodian la puerta del Rectorado. Hallú y Pastorino, sin lugar a dudas, forman parte de este régimen policíaco y antidemocrático que garantiza la clandestinidad de las sesiones de los órganos de gobierno para perpetuar una política capitalista que destruye nuestras condiciones de estudio y de trabajo, en definitiva, que destruye y privatiza a la educación pública.

Quieren repetir la historia

Hoy, tres años después, Pastorino pretende hacernos creer que va a dejar libres al Presidente del CECaP y a la mayoría de los consejeros estudiantiles por ser “violentos”. Es un hipócrita. Valiéndose de los lamentables incidentes que ocurrieron durante el escrutinio pretende hacer pasar un ataque frontal a los luchadores.

Los estudiantes y los trabajadores del Pelle tenemos que ver las cosas de frente y con claridad: acá no estamos hablando de un problema disciplinario sino de una bochornosa maniobra política, por parte de las autoridades del Pelle y de la UBA, para aplastar a las organizaciones de lucha de cara a la próxima Asamblea Universitaria donde, como en el 2006, las camarillas querrán perpetuarse en el poder cueste lo que cueste.

La realidad es que reprimen ahora para allanar el camino de cara a la elección del rector. Por algo, en menos de un mes, fueron sancionados estudiantes del Pelle, el Buenos Aires y el ILSE. No es casualidad. A los compañeros del ILSE la rectora los sancionó por hacer un “aplausazo” en defensa de la realización de su jornada deportiva (lo que serían sus olimpíadas). En el caso del Buenos Aires, sancionaron a los estudiantes por movilizarse el 16 de Septiembre en el aniversario de La Noche de los Lápices. No hay lugar a dudas: estamos ante una ofensiva en regla.

Quieren dejarnos libres a toda costa

Desde que el vicerrector Leandro Rodríguez anunció los pedidos de sanción abundaron las irregularidades. Como en la Asamblea Universitaria, las autoridades no le prestan mucha atención a las “formalidades” cuando su objetivo es reprimir a los luchadores.

En primer lugar, antes de hacer el pedido de sanción, Rodríguez averiguó la cantidad de faltas que tenían los consejeros. Luego, en contra del procedimiento regular, solicitó, dentro del mismo pedido de sanción y antes de que los consejeros pudieran hacer su descargo, la cantidad de suspensiones suficientes para dejarlos libres. Este sólo hecho, en sí mismo, ya bastaría para anular todo el proceso de sanciones porque demuestra que está completamente viciado por una clara intencionalidad política. Evidentemente, el castigo que Rodríguez propuso no era en función de “nuestra mala conducta” sino de cómo dejarnos libres. Por algo pidió antes el listado de faltas – esto nunca se hace y es un procedimiento absolutamente irregular. Una vez más, se ve que para las autoridades la justicia se aplica según los intereses del juez de turno – es decir, de ellas mismas.

En segundo lugar, se pusieron las sanciones sin darle la posibilidad a los tutores, docentes y estudiantes de presentar un descargo y un informe sobre la situación de cada estudiante. Evidentemente, a Rodríguez y a Pastorino la evaluación del cuerpo docente y la posibilidad de permitirnos una mínima defensa los tenía sin cuidado. Una vez más, radicales de la Franja Morada y kirchneristas de Hallú resuelven todo a espaldas de los estudiantes y los trabajadores.

En tercer lugar, y tal vez una de las cosas más groseras, no sólo a una misma conducta se le puso distintas cantidades de suspensiones (lo cual ya es en sí totalmente arbitrario) sino que las suspensiones que recibe el Presidente del CECaP, en un primer momento, iban a ser bajo el cargo de “autor intelectual”. Sí, eso mismo nos dijo Leandro Rodríguez. ¿Es necesario aclarar algo más? ¿Desde cuándo se puede sancionar a un estudiante por ser “autor intelectual”? ¿En qué reglamento dice eso? En ninguno. En todo caso, ¿qué pruebas tienen? Ninguna, porque es ridículo acusarnos de eso. Es sencillamente insostenible.

Como las autoridades sabían que ese cargo era injustificable buscaron una maniobra legal para sancionarnos. Ahora cambiaron su discurso y dicen que el cargo es “promover la violencia”. Sin embargo, la embarran cada vez más. Con cada maniobra que hacen, son cada vez más truchos. ¿Cómo se supone que hizo el Presidente del CECaP para “promover la violencia” si estuvo escrutando toda la noche en la sala de profesores con Pastorino y Rodríguez al lado? ¿Acaso las autoridades o alguien lo vio en algún momento “promoviendo la violencia”? En todo caso, ¿a qué se refieren con “promover la violencia”?

Todo el mundo sabe que el FEL retrocedió y se atrincheró detrás de la puerta del colegio, justamente, para defenderse. Es decir, que no buscaba atacar sino evitar que haya más enfrentamientos. Por eso mismo, se bloqueó la puerta para evitar que el conflicto ingresara al colegio y después tuviéramos que lamentar algún herido. Por eso mismo, se esperó adentro del colegio durante varias horas hasta que se hizo de día. ¿A eso las autoridades le llaman “promover la violencia”?

Le preguntamos a las autoridades: cuando los padres, docentes, no-docentes y graduados instaban pública y permanente a que los estudiantes bloqueemos la puerta del colegio para no dejar que entrara Viegas, ¿también estaban “promoviendo la violencia”? Parecería, entonces, que según las autoridades ahora la inmensa mayoría del colegio debería estar libre o sumariada. Ni qué hablar ya de cuando el Cuerpo de Delegados, en el marco de un plan de lucha, convoca a una asamblea para tomar el colegio. “¡Eso sí que es promover la violencia!” dicen juntos Rodríguez y Pastorino. Evidentemente, su planteo no tiene ni pies ni cabeza. Mejor dicho, suena muy descabellado y parece una locura, pero en realidad tiene una clara lógica represiva.

Por eso, la única forma en que se lo puede tomar en serio es que no se acusa al Presidente del CECaP de “participar en los hechos” (cualquiera sea la interpretación que se haga y lo que efectivamente pasó) sino de ser “el responsable político que planeó previamente la violencia”, es decir, el “autor intelectual”. Por lo tanto, queda claro que sólo cambian la figura legal para maniobrar mejor y lograr sancionarlo. En realidad, se lo acusa de lo mismo pero las autoridades le cambian el nombre según su antojo y conveniencia. Son unos hipócritas.

Por otra parte, si alguien puede ser sancionado por “promover la violencia”, vale repetir una vez más que estas autoridades universitarias fueron “promovidas a su cargo por la violencia” de la Policía Federal que fue planeada, previamente, junto con los Kirchner. En ese caso, si Hallú y Pastorino tuvieran un poco de coherencia y estatura moral, como mínimo, deberían renunciar. Y, para ser sinceros, eso ni siquiera alcanzaría. Alguien que tiene tan pocos escrúpulos como para asumir gracias a una salvaje y premeditada represión de docentes y estudiantes en la puerta del Congreso Nacional no debería ser rector de ningún establecimiento educativo sino que, por el contrario, debería estar preso.

Sin embargo, estas “autoridades delictivas” no sólo gozan de total impunidad sino que el hecho de querer sancionarnos por ser “autor intelectual” demuestra que se han envalentonado y que estamos ante un ataque directo a la organización de los luchadores. Si fuesen coherentes en su razonamiento (cosa que las autoridades no suelen hacer) también deberían decir, entonces, que el FEL es “una asociación ilícita” y, por lo tanto, exigirle que “se disuelva” por estar “fuera del marco legal” ya que, sistemáticamente, “promueve la violencia”.

¿O qué es una agrupación sino el verdadero “autor intelectual” de los militantes? ¿O acaso el FEL no discute colectivamente su intervención en reuniones de agrupación que se realizan “con anterioridad a los hechos”? De todas formas, ¿se supone que está prohibido organizarse en el Pelle? ¿Desde cuándo rige un “estado de sitio” y se suspendió el derecho a reunirse y agruparse políticamente? ¿Acaso, entonces, también Bulacio será citado a declarar por ser “el autor intelectual” de la AGD y Chilo el de la Comisión Interna No-Docente?

Al querer sancionarnos con ese cargo, entonces, Pastorino sienta jurisprudencia y allana el terreno para perseguir a cualquier agrupación de estudiantes o de trabajadores según su línea política. De esta forma, tendrá una herramienta perfecta para extender su avanzada represiva sobre el conjunto del colegio. Que nos sancionen por ser “el autor intelectual”, palabras más palabras menos, significa poder sancionarnos no “por conducta” sino “por lo que pensamos”. Estamos, entonces, ante una clara persecución política por parte de Rodríguez y Pastorino. Tenemos que pararlos.

Quieren aplastar al Consejo Resolutivo y al Consejo de Convivencia

Esto no es todo. Como parte del ataque a los luchadores, también quieren llevarse puesto a cualquier órgano democrático de gobierno del colegio. Las autoridades pretenden aplicar estas sanciones por fuera de lo que decida el Consejo Resolutivo y el Consejo de Convivencia. En la última sesión de Consejo, Pastorino dijo que “ya era una decisión tomada” y que, por lo tanto, “el Consejo no tenía ninguna atribución para resolver”. Una vez más, las camarillas quieren hacer del Resolutivo un Consejo Asesor.

Por otra parte el Consejo de Convivencia, creado en la última sesión del jueves, se demuestra impotente antes de nacer porque su debut será no pronunciarse frente a la represión de Pastorino. En este sentido, se deduce que sólo lo van a convocar cuando les convenga o tengan ganas. En el mejor de los casos será un saludo a la bandera. El “parlamentarismo” y “el diálogo para el libre intercambio de ideas” nada pueden hacer frente a la prepotencia de las autoridades. Contra las autoridades hay una sola respuesta: la lucha independiente de estudiantes y trabajadores.

Siguiendo firmemente este camino, tenemos que exigir que se reúnan los Consejos y valernos de la mayoría del Frente Único de Lucha para votarles en contra y dejar en evidencia sus maniobras. Como Pastorino sabe que podemos hacer esto, también quiere aplastar al Frente Único de Lucha, su mayoría en los órganos de gobierno y eliminar cualquier expresión de democracia en el colegio con tal de llevarse puesto a los luchadores. Pastorino no quiere reconocer más autoridad que sus propios intereses. Quiere echarnos y su necedad no reconoce límites. Por eso se quiere llevar puesto todo.

Tienen el poder y lo van a perder

El modelo de colegio que a Pastorino le gustaría es el del Buenos Aires: quiere que el Consejo de Convivencia y el Resolutivo estén pintados o sean una correa de transmisión de las autoridades como pasa con González Gass. Quiere tener la total libertad de poder desconocer la decisión mayoritaria del Consejo cuando le parezca. Por lo tanto, está pidiendo que aceptemos la independencia “de hecho” del poder burocrático y reaccionario de las camarillas de la UBA frente a los órganos de gobierno del colegio. Quiere imponer que el rector, tanto él como el que venga, pueda hacer lo que quiera. Quiere fortalecer, de esta forma, el poder que no se vota: el poder del aparato, de la burocracia y de las camarillas. La democracia universitaria, entonces, se demuestra como una farsa.

Las camarillas no aceptan que nadie les pueda poder un límite. Quieren disponer de la totalidad del poder político. Por lo tanto, redoblan la apuesta y quieren que la lucha sea a todo o nada. Para lograr esto, es que Pastorino pretende imponer en el Pellegrini un auténtico “régimen de facto” en el sentido más estricto del término: el gobierno de “los hechos consumados”. Un gobierno paralelo que funciona a espaldas del Consejo Resolutivo y donde él no tiene que rendirle cuentas a nadie más que a las camarillas de la UBA.

Este “gobierno de facto”, al desconocer y violentar la voluntad mayoritaria expresada por miles de docentes y estudiantes que votamos para el Consejo Resolutivo, tiene un sólo nombre. Pastorino, al desconocer al Consejo Resolutivo, está desconociendo a la única autoridad legítima que tiene el colegio. Por lo tanto, se está apropiando por la fuerza de un poder que no le pertenece y que ningún estudiante o trabajador le delegó. Pastorino, entonces, con su gobierno “de facto” está haciendo un auténtico “golpe de Estado” contra el Consejo Resolutivo.

Incluso, si con eso no alcanzara, ya están preparando la última variante, que es la intervención directa del colegio. Una medida tan extrema sólo se puede explicar porque las camarillas sienten que pueden perder el poder y quieren preservarlo a toda costa.

Por eso, en realidad, cuando nos dejan libres Pastorino y Rodríguez están rebosantes de soberbia pero, al mismo tiempo, demuestran una gran cobardía. Ellos saben que si no nos reprimen, pierden. Saben que no van a poder quebrar la sólida unidad obrero-estudiantil que existe en el Pelle. Saben que no van a poder sacarse de encima tan fácilmente al Frente Único de Lucha. Saben que las elecciones de Consejo dieron y van a seguir dando una y otra vez la mayoría a los luchadores. Saben que hace rato que ya no tienen ninguna autoridad moral para dirigir el colegio. Saben, en definitiva, que si ellos desconocen al Consejo Resolutivo entonces los estudiantes y los trabajadores los vamos a desconocer a ellos.

Lo de Pastorino y Rodríguez, por lo tanto, es la jactancia de quienes creen poder disponer del poder según sus propios antojos pero saben que los estudiantes y los trabajadores del colegio ya le dieron la espalda.

“Ni se molesten en rendir las integradoras”

Un ejemplo descarado de este grado de soberbia es que, aún sin que Pastorino hubiese aplicado las sanciones, Enrique Sardi (vice-rector del turno mañana) le “aconsejó” a los estudiantes del FEL que “ni se molesten en rendir las integradoras”. Es decir, que directamente nos dijeron en la cara que todo “el procedimiento legal” era una puesta en escena para legalizar las sanciones que ellos mismos ya decidieron ponernos de antemano. Sardi repite con sus “sugerencias”, entonces, lo mismo que dijo Pastorino en el Consejo. Para colmo, son tan groseros que ni siquiera respetan su propio libreto. De ahí todas las irregularidades que cometen. No les importa nada.

Este tipo de actitudes demuestran el profundo desprecio que las autoridades del colegio tienen por la cursada de los estudiantes y el trabajo cotidiano de nuestros docentes. Esto más que un “juicio” ya se ha transformado en una farsa ilegitima e ilegal que no se puede ni se debe tolerar.

No son autoridades. Son una camarilla. Son una mafia.

Es una vergüenza, un hecho inadmisible, que las autoridades, las mismas que dicen “querer educarnos”, vengan a “gozarnos” en la cara. Cada día que pasa vamos confirmando que, más que “educar”, parece que quieren “aprovechar la oportunidad” para cobrarnos toda la lucha por la democratización. Hoy, estamos ante un auténtico “ajuste de cuentas” por parte de las autoridades. Estamos sufriendo una persecución política. Es decir que, en su descomposición, las autoridades ya actúan como una mafia, que enquistada en el poder, se vale de la autoridad de policía y de juez para perseguirnos.

Desde el FEL siempre supimos que la lucha consecuente en defensa de los intereses de estudiantes y trabajadores, la verdadera lucha por la democratización, la lucha porque al Pelle lo gobiernen sus estudiantes y sus trabajadores, iba a ganarnos el odio de cuanto rector pusiesen las camarillas de la UBA. Por algo siempre dijimos “Ningún rector de este Consejo Superior”.

Hoy, estamos orgullosos de la lucha que dimos, damos y vamos a seguir dando. La reivindicamos, con todos sus aciertos y sus errores, sabiendo que siempre estuvimos del lado correcto: del lado de los estudiantes y los trabajadores. Ahora, más que nunca, los militantes del FEL estamos dispuestos a llevar esta lucha hasta al final. Contra todos y contra todo, el FEL no va a abandonar el camino que decidió tomar hace ya 5 años junto a los trabajadores y los estudiantes del Pelle.

Pastorino, Rodríguez, Sardi y Parietti: todo el colegio los repudia

Las autoridades creen que dejándonos libres nos “echan del colegio”. Piensan que “echando a los que promueven la violencia” van a poder quedarse tranquilos en sus puestitos. Sin embargo, se equivocan. Están muy equivocados. Les recordamos que, en nuestro breve paso por el colegio, los estudiantes ya aprendimos qué tenemos que hacer con las autoridades que nos atacan. Como auténticos hijos del Argentinazo, los estudiantes del Pellegrini ya aprendimos que no sólo tenemos el derecho a poder elegir democráticamente a nuestros gobernantes sino que, fundamentalmente, también tenemos el derecho a poder rajarlos. Por eso ya pasaron muchas autoridades, de todos los colores y pelajes, pero el FEL se quedó.

Recordemos: Gak se fue, Tasca se fue, Escandel se fue, Perciavalle se fue, Veiga se fue, Zorzoli se fue, Esturo se fue, Bernava se fue, Viegas se fue y muchos otros se fueron yendo y, sin embargo, el FEL se quedó, por la sencilla razón de que siempre defendimos a los estudiantes y a los trabajadores. Ahí está nuestra fuerza y nuestra principal razón de ser. Por eso, mientras haya en el Pelle un estudiante o un trabajador que quiera luchar, el FEL va a seguir existiendo. Por eso, también, el pequeño y prepotente poder que tienen las autoridades es eterno e impune hasta que todos los repudian, le ponemos un límite a sus atropellos y dejan el puesto o los echamos.

Por lo cual, queremos decirlo públicamente y con todas las letras: si este jueves resuelven dejarnos libres, los que se van a terminar quedando afuera de la escuela son las autoridades.

Pastorino, Rodríguez, Sardi y Parietti van a terminar yéndose del colegio por el masivo repudio que su conducta represiva va a despertar en los estudiantes y los trabajadores del Pelle. Y esto las autoridades lo saben, por más que lo quieran negar. Saben que el colegio repudia lo que están haciendo. Por algo recurren a una actitud bajísima y cobarde como es dejarnos libres a fin de año. Actúan igual que las camarillas de la UBA haciendo la Asamblea Universitaria durante las vacaciones. Las actuales autoridades del Pellegrini, con Pastorino a la cabeza, son pichones de burócratas. Tienen a Hallú, a González Gass y al Consejo Superior como un modelo a seguir. Hacen carrera, entonces, para sumarse a la lista de represores. Pero los estudiantes y los trabajadores no se olvidan. Esta no se la van a olvidar. Tal vez las autoridades no se vayan hoy, puede ser, pero mañana seguro. Se los garantizamos.

Como en Terrabusi-Kraft, el Subte y el Suteba La Plata: ¡Abajo la represión kirchnerista!

Esta avanzada represiva no pasa sólo en el Pelle. A nivel nacional y continental ya se están viniendo tiempos jodidos. La persecución kirchnerista contra los trabajadores de Terrabusi-Kraft, el Subte y el Suteba La Plata es una muestra de esto. No es casual que mientras avanza la represión kirchnerista, quienes apoyan al gobierno sean los que en el Pelle defiendan las sanciones (en primer lugar, el propio Pastorino que las aplica y es un declarado kirchnerista).

La 16 de Septiembre, por otro lado, apoya la represión kirchnerista no porque hubo “un problema disciplinario” sino porque ¡es una agrupación de estudiantes kirchneristas! Por eso, la 16 de Septiembre no sólo apoya las sanciones que pusieron las autoridades del Pelle sino que también apoya al gobierno nacional que reprime en Terrabusi-Kraft, en el Subte y en el Suteba La Plata.

Tiene toda una lógica el asunto. Acá el problema es que el gobierno de Cristina quiere aplastar las organizaciones independientes y de lucha para generar “un buen clima de inversiones” como le demandó la embajada yanki y la UIA frente a la lucha de Terrabusi-Kraft. Por eso el kirchnerismo no sólo reprime sino que también sale a cooptar varios sectores (por ejemplo, a través de la Ley de Medios) y rearma su aparato a través del relanzamiento de Moyano y las apuradas de la puntera y patotera de Milagros Salas.

Estamos ante un giro represivo del kirchnerismo a nivel nacional. El kirchnerismo, ese sí, es el que “promueve la violencia” y no los luchadores. La creación de la Policía de Macri, con el apoyo de los K, va en el mismo sentido. Junto con Macri, Fino Palacios, Osvaldo Chamorro, Montenegro, Nardosky y Ciro Jaimes, evidentemente, deberían ser los sancionados. Sin embargo, parecen estar bastante cómodos con la impunidad que les garantiza la justicia kirchnerista. El golpe de Estado en Honduras y las bases yankis en Colombia terminan de completar este cuadro continental donde la derecha y la represión van copando la escena. Frente a todo esto, Pastorino no es más que un pequeño peón que se mueve según la jugada de otros. Queremos advertir, entonces, que si estas sanciones pasan las autoridades estarían recibiendo un importante cheque en blanco para reprimir a los luchadores.

De conjunto, con sus diferencias, sus matices y sus tiempos, se está armando lentamente un cuadro represivo a nivel nacional. La candidatura de Duhalde, del asesino de Kosteki y Santillán, a la presidencia para el 2011 forma parte de esto. Todos sabemos que el Pelle nunca estuvo ajeno a la situación política nacional. Los rectores siempre fueron y vinieron según el poder de turno. Por lo tanto, en el Pelle tenemos que frenar la avanzada represiva de entrada sabiendo lo que se viene detrás. Como dijimos en la campaña electoral y en las asambleas del CECaP, preparan la intervención del Pellegrini. Por lo tanto, con su represión, Pastorino prepara el terreno para un nuevo Viegas. No lo podemos permitir bajo ningún punto de vista.

Ningún estudiante libre. Reconocimiento de las elecciones. Abajo la Asamblea Universitaria reaccionaria.

El próximo 14 de Diciembre las camarillas universitarias intentarán elegir un nuevo rector de la UBA sin haber reformado los estatutos universitarios. De esta manera, las camarillas radicales se unen con los kirchneristas para no cambiar nada y perpetuarse en el poder. Es por esto que Pastorino y Leandro Rodríguez lanzan este ataque para preparar la reelección de Hallú. Llamamos al movimiento estudiantil, docente y no-docente a enfrentar la política capitalista y privatizadora de la Asamblea Universitaria. A su vez, este jueves convocamos a un acto en la puerta del colegio mientras sesiona el Consejo Resolutivo.

Sabemos que este jueves se juega mucho. Este jueves, puede ser que nos dejen libre o no. Este jueves, las autoridades tal vez resuelvan que varios estudiantes no se puedan recibir y queden libres a menos de una semana de terminar su secundaria. Este jueves, puede ser que las autoridades quieran desconocer las elecciones o no. Este jueves, puede ser que las autoridades logren consumar su hipócrita, ilegal e ilegítima represión pero saben que mientras los estudiantes y los trabajadores estamos de parcial en parcial vamos a seguir muy atentos todo lo que hagan.

Las autoridades saben que todos nuestros ojos están puestos sobre ellos. Saben que las asambleas del lunes dejaron bien en claro cuál es el mandato para todos los consejeros. Saben que el colegio ya resolvió. Saben que el Pelle nos defiende. Saben que nadie quiere, ningún estudiante y ningún trabajador, que nos dejen libres o impugnen las elecciones. Ahora tan sólo basta ver si las autoridades van a reconocer el mandato o no.

Por lo tanto, este jueves no va a ser el FEL quién tenga que dar explicaciones. No, se equivocan. Este jueves, y de ahí en más, van a ser las autoridades del colegio quienes van a estar siempre en el banquillo de los acusados.

Pesa sobre su conciencia, entonces, cuán lejos vayan a llegar el jueves con su infamia y descomposición. A las autoridades les decimos: sepan, de todas formas, que ya fracasaron porque en todo el colegio nadie les cree nada. Sepan, que con cada paso que den, conforme más sanciones nos pongan, no harán más que ganarse un mayor repudio y descrédito. Ustedes ya saben que se están hundiendo y saben que por este camino se van a terminar de hundir.

A Pastorino, a Rodríguez, a Sardi y a Parietti les decimos: si alguna vez les interesó un poco aprender de la historia, sabrán que sobre las bayonetas ningún gobierno se pudo sentar. Repriman todo lo que consideren necesario, entonces, porque así sólo van a terminar perdiendo lo poco que les queda de legitimidad. La decisión es de ustedes.

De todas formas, frente a la decadencia moral de las autoridades, los estudiantes y los trabajadores del Pelle obraremos en consecuencia, como siempre. Ya sabemos lo que tenemos que hacer con las “autoridades”. La lucha por la democratización ya demostró hace rato que este colegio no las necesita. Nosotros, los estudiantes y los trabajadores, podemos hacernos cargo: este colegio es nuestro, no de las camarillas, y lo podemos gobernar.

Jueves 09/11 a las 12hs: Acto en la puerta del Pelle
Lunes 14/12: Marchamos a la Asamblea Universitaria en el Buenos Aires
FEL
Frente de Estudiantes en Lucha
Conducción CECaP

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